Conoce la historia de la mujer que logró tener un imperio a sus pies

Votar, conducir o trabajar son algunas de las cosas que las mujeres obtuvieron como derecho, mucho más tarde que los hombres, acciones que en siglos anteriores eran vistas como privilegios y que luego de una lucha constante por la igualdad de condiciones, son actividades, que en casi todos los lugares del mundo, pueden hacer como parte de su cotidianidad. 

Pero, como para todos los casos hay excepciones, hubo una mujer que contra todo pronóstico logró conquistar el corazón de Suleimán, el sultán que tuvo bajo su mando al imperio Otomano entre los años 1520 y 1566, en medio de una civilización que, entre otras cosas, estaba acostumbrada a que las mujeres complacieran a los hombres en todos los aspectos. 

Su nombre era Aleksandra Lisovska, también conocida como Roxelana, quien pasó de ser esclava a una de las mujeres más importantes del reino. Fue vendida y  llevada al harén, aun siendo virgen. Al llegar a este lugar, al que debía servirle a sultanes, príncipes y demás, no pasó desapercibida debido a su belleza e inteligencia. 

“Se enamoró hasta el tuétano de los huesos de Roxelana, una esclava pelirroja de origen eslavo que protagonizó un gesto insólito en los anales de la dinastía otomana. Solimán declaró libre a Roxelana y no solo se casó con ella, sino que la convirtió en su consejera en cuestiones políticas”, señala uno de los apartados del libro Los Austrias: el imperio de los chiflados, escrito por César Cervera. 

¿Qué logró esta mujer? 

Roxelana fue catalogada con el nombre de Khurrem, que significa “la risueña” y en el harén fue alfabetizada y aprendió cuatro idiomas. Aunque Solimán estaba casado con una princesa extranjera llamada Mahi Debram Gulbehar, fue inevitable que no pusiera sus ojos en Roxelana. Además, contaba con el respaldo de Hafisé, la madre de Suleimán y quien no gustaba mucho de Mahi. Por eso, hizo hasta lo imposible para que estuvieran juntos. 

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El poder de Roxelana sobre Soleimán fue tan grande que logró hacer que matara a su primogénito Mustafá, fruto de su matrimonio con Mahi. “Era una estratega extraordinaria y una auténtica artista política. Roxelana planificaba cada movida como si estuviera jugando ajedrez”, relata Alev Lytle Croutier, en su libro El Harén: el mundo detrás del velo.

Estuvieron juntos hasta el final de sus días y Solimán cumplió su promesa de amarla por siempre. Si quieres conocer los detalles de esta historia y de Roxelana, no te pierdas la novela “El Sultán” que llega a las noches de Canal 1 desde el próximo 10 de septiembre.