Salen a la luz un centenar de cartas eróticas de un famoso pintor: ¿qué dicen?
Estas son las únicas cartas conocidas del artista con contenido erótico, y destacan por su sensibilidad y su visión adelantada para su tiempo.
- Mazda, vivir para inspirar: los logros de una artista que nos representa en el exterior
- Sin agua y alimentos, famoso artista Amaury Gutiérrez está retenido en Migración Colombia
El pintor francés Gustave Courbet (1819-1877), conocido por su provocador cuadro El origen del mundo (1866), vuelve a estar en el centro de la polémica gracias a un hallazgo sorprendente: un centenar de cartas de alto contenido erótico enviadas por el artista a una parisina de la alta sociedad.
Salen a la luz de cartas eróticas
Estas misivas, descubiertas recientemente en una biblioteca municipal de Besançon, Francia, revelan una faceta desconocida del célebre representante del realismo.
Las cartas, intercambiadas entre noviembre de 1872 y abril de 1873 con Mathilde Carly de Svazzema, narran una relación apasionada, aunque platónica.
Mathilde, una mujer de alta sociedad que había sido abandonada por su esposo, se convirtió en la musa epistolar de Courbet durante meses.
El pintor le escribió 25 cartas, mientras que ella respondió con 91. A pesar del intenso contenido de sus mensajes, nunca consumaron físicamente su relación.
Fragmentos de estas cartas deslumbran por su audacia y creatividad. En una de ellas, Courbet escribe:
“Querida P…, sabes que daría no sé qué en este momento por chupar tu c…, morder tus pelos dorados, tu c… y devorar tus grandes pezones puntiagudos”.
Mathilde, por su parte, le responde:
“Tendré mi c… listo para recibir las sensaciones que te plazca hacerle experimentar”.
El hallazgo, que permanecerá expuesto en Besançon, no solo muestra el lado más íntimo de Courbet, sino también su perspectiva moderna sobre las relaciones humanas.
Según Henry Ferreira-Lopez, director de las bibliotecas municipales de Besançon, estas son las únicas cartas conocidas del artista con contenido erótico, y destacan por su sensibilidad y su visión adelantada para su tiempo.
El contexto histórico de Courbet agrega otra capa de complejidad a estas cartas. Tras su implicación en la Comuna de París (1870-1871), el pintor estaba deprimido y aislado socialmente, lo que influyó en el tono íntimo de su correspondencia.
Las cartas, olvidadas por décadas en los archivos de la biblioteca, fueron descubiertas por Agnès Barthelet, una bibliotecaria que las sacó a la luz.
Este hallazgo no solo reaviva el interés por la obra de Courbet, sino también por el hombre detrás del pincel, marcado por su pasión, su controversia y su inquebrantable espíritu revolucionario.
Esta colección promete convertirse en un punto de referencia para quienes deseen explorar la vida privada de uno de los artistas más disruptivos del siglo XIX.
- Síguenos en nuestro canal de WhatsApp.