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Mundo

Chile sepulta la Constitución de Pinochet en un plebiscito histórico

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Chile decidió este domingo, en un histórico plebiscito, redactar una nueva Constitución y enterrar la actual, heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).

Los chilenos votaron abrumadoramente a favor del “Apruebo” (más del 78 % de los votos), la opción que abre un proceso constituyente.

Además, eligieron que este sea absolutamente ciudadano, encargando la redacción de la nueva Carta Magna a una convención constitucional (79 % de los votos) que estará compuesta por 155 personas elegidas por votación popular solo para ese fin.

Más de 14,7 millones de chilenos fueron llamados a acudir a las urnas en una votación que se celebró en plena pandemia del nuevo coronavirus y colmada de restricciones sanitarias y protocolos para evitar posibles rebrotes.

Pese a ello, la participación superó el 50 %, el mejor porcentaje desde que el voto dejó de ser obligatorio en 2012.

La ciudadanía, la gran protagonista

El resultado pone a la ciudadanía en el centro de un proceso único que comenzó con la toma de las calles a partir del 18 de octubre de 2019 con masivas manifestaciones para reclamar un modelo socioeconómico más justo.

La rebelión ciudadana motivó a la clase política a tratar de canalizar el descontento mediante en un plebiscito.

“Hoy ha triunfado la ciudadanía y la democracia. Hoy ha prevalecido la unidad sobre la división y la paz sobre la violencia. Y esto es un triunfo de todos los chilenos que amamos la democracia, la unidad y la paz”, dijo el presidente de Chile, Sebastián Piñera.

El fin de una era

Así mismo, la Constitución de Pinochet fue reformada multitud de veces durante los últimos 30 años de democracia, quedando despojada de sus enclaves autoritarios y antidemocráticas, pero siguió impedía grandes reformas estructurales como las claman los ciudadanos en salud, educación y pensiones, entre otras.

Finalmente, la nueva Carta Magna acabará definitivamente con uno de los últimos reductos de la era Pinochet, mientras que el cambio de modelo socioeconómico dependerá de los consensos que los constituyentes alcancen.

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