María Fernanda Cabal demanda a Daniel Quintero por difamación y acoso tras botar su foto a la basura
María Fernanda Cabal, senadora del Centro Democrático, presenta una denuncia penal contra Daniel Quintero, exalcalde de Medellín, por calumnia y hostigamiento. Descubre los detalles de este conflicto político y legal en este artículo.
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La senadora del Centro Democrático María Fernanda Cabal presentó una denuncia penal contra el exalcalde de Medellín Daniel Quintero, por los delitos de calumnia y hostigamiento, luego de que este publicara en sus redes sociales un video en el que arroja a la basura una foto de su rostro, junto con las de otros políticos.
El hecho ocurrió el pasado 15 de octubre, cuando Quintero acompañaba al candidato a la alcaldía de Medellín Juan Carlos Upegui, en un acto de campaña en el barrio Manrique. En el video, que se hizo viral, se ve a Quintero sosteniendo una foto de Cabal y diciendo: “Así se le habla a los bandidos”. Luego, la lanza a un contenedor de basura, donde también había fotos de los expresidentes Álvaro Uribe y Andrés Pastrana, y del senador Gustavo Petro.
A la basura todos los que han querido acabar con Medellín y Colombia. pic.twitter.com/ZKFgmVYKUx
— Daniel Quintero Calle (@QuinteroCalle) October 2, 2023
Cabal consideró que este gesto era una ofensa a su dignidad, su buen nombre y su reputación, así como una forma de violencia política de género y de acoso por su condición de mujer y de líder de la oposición. Por eso, radicó una denuncia ante el despacho del fiscal general Francisco Barbosa, solicitando que se investigue a Quintero por los delitos de calumnia y hostigamiento.
Según la denuncia, Quintero pudo haber cometido el delito de calumnia porque en el contenido en sus redes en el que divulga el video en mención, en el que tiene su foto en las manos, pone en la parte superior un aviso que dice: “Así se le habla a los bandidos”. Cabal argumentó que esta frase implicaba una falsa imputación de conductas delictivas o deshonrosas contra ella, sin tener ninguna prueba o fundamento.
En cuanto al delito de hostigamiento, Cabal señaló que Quintero había actuado con ánimo de injuriarla, humillarla y menoscabarla, aprovechándose de su condición de mujer y de su posición política. Cabal afirmó que este tipo de actos eran inadmisibles en una democracia y que buscaban intimidarla y silenciarla.
Quintero, por su parte, defendió su acción como una forma de protesta pacífica y simbólica contra la corrupción y la politiquería. Aseguró que no tenía nada personal contra Cabal ni contra ningún otro político cuya foto hubiera botado a la basura. Dijo que se trataba de una expresión legítima de su opinión y de su respaldo al candidato Upegui, quien representa una alternativa ciudadana frente a las maquinarias tradicionales.
Quintero también negó que hubiera incurrido en algún delito o que hubiera atentado contra la dignidad o los derechos de Cabal. Afirmó que respetaba su labor como senadora y como mujer, pero que no compartía sus ideas ni sus propuestas. Agregó que estaba dispuesto a enfrentar cualquier proceso judicial que se iniciara en su contra por este hecho.
La denuncia de Cabal contra Quintero ha generado una gran polémica en el ámbito político y social. Algunos sectores han respaldado a Cabal y han rechazado el gesto de Quintero como una falta de respeto y una incitación al odio. Otros sectores han apoyado a Quintero y han considerado que su acción fue una manifestación válida y creativa de su inconformidad con el sistema político. Lo cierto es que este episodio ha evidenciado la polarización y la crispación que vive el país en vísperas de las elecciones regionales del próximo 27 de octubre.