¿Cómo va la economía del país? W Sin Carreta habló con la gente sobre su bolsillo

El Dane, la entidad pública encargada de la producción y difusión de estadísticas oficiales en el país, aseguró que la inflación bajó un 5,81%, los mismos niveles en los que estaba hace casi tres años, una noticia que, a primera vista, sería positiva para todos los colombianos.

Sin embargo, W Sin Carreta salió a las calles, específicamente a los supermercados y plazas de mercado, para hablar con la gente y preguntarles si en realidad han sentido un alivio en sus bolsillos, que sería lo esperado tras el reporte del Departamento Administrativo Nacional de Estadística.

Y es que en relación con septiembre del 2023, la variación fue del 0,24%, es decir, una reducción del 0,3%.

Lea también: Cruda realidad en Colombia: familias luchan por sobrevivir con menos de una comida al día

“Han aumentado (los precios de la canasta familiar)”, dice José, un ciudadano. “De pronto si hay productos que se reducen en el costo, pero, también, puede ser que haya cierto manejo de estadísticas para favorecer la percepción del costo de vida, cuando, en realidad, el costo de vida se ha incrementado”, añadió.

Carlos Peña también está de acuerdo con José y, de hecho, indica que el aumento ha sido brusco; “Ya uno con 50 mil pesitos, antes eran varias cositas, ahora son dos o tres cositas no más”. Agregó que, las estadísticas del Dane las da “los que están en sus oficinas” y no quienes, en realidad, salen de sus casas a comprar el mercado.

Luz Marina, comerciante de una plaza de mercado, al igual que los otros dos personajes, dice que los precios han aumentado y agrega que, hay escasez de comida; “No sé si es por el clima, porque el campesino ya no quiere sembrar, no entiendo el porqué, pero hay mucha escasez y está muy caro todo, la verdad”.

Al parecer, por el testimonio de los colombianos, nada parece mejorar y, en cambio, los bolsillos de los ciudadanos están cada vez más ‘apretados’, pues el dinero no alcanza y las estadísticas parecen ser una ilusión.

Artículos relacionados

Las cuentas del Dane: ¿por qué creerles? Ni la empanada se salva de los efectos de la inflación ¿En qué gastan más plata los colombianos?